El ContrActivismo es una declaración antagónica al pseudo activismo en el que muchos nos hemos involucrado.
El reflejo del cinismo mexicano.
El ContrActivismo es una declaración antagónica al pseudo activismo en el que muchos nos hemos involucrado. “Legitima” los hábitos, costumbres y/o dinámicas socioculturales como un medio para visibilizar la ineficacia de las instituciones públicas y la escasa cultura cívica en México. Es una provocación a la acción. Destacando el cinismo; es una declaración de lo absurdo, a partir de la formalización de las prácticas actuales (como las mordidas, pagar piso y protección al narco), y de las lógicas sociales, políticas y económicas, desde el punto de vista del ciudadano y de los representantes de los mismos, dígase del servidor o funcionario público. Es por esto que tanto la constitución como las principales leyes, según el ContrActivismo, formalizan lo existente, lo que padecemos gracias a nosotros mismos, siendo un reflejo de la realidad y no de la “utopía” que está escrita y que pocos estamos dispuestos a respetar.
En México, las leyes que nos pseudo rigen, a unos más que a otros, han sido una “adaptación” de una realidad que obedece a lógicas que poco reflejan la cultura mexicana pero que la han definido y fortalecido con el pasar de los años. Como país colonizado, el oportunismo se vió como la posibilidad de subsistir en un entorno hostil. Pero, ¿qué pasa si estas prácticas prevalecen en el tiempo y, lejos de abonar a una intención de independencia y desarrollo, fortalece los hábitos y costumbres que poco favorecen a mejorar las condiciones en las que se vive y se convive? ¿Nos hemos olvidado que los que gobernamos somos mexicanos para los mismos mexicanos?
En este sentido, el ContrActivismo reconoce la moral como una línea discontinua y difusa, que abona a una realidad distorsionada donde continuamente te cuestionas qué hacer y cómo, y si eso no se contrapone a tu discurso como activista. Las costumbres, las normas y los tabúes llevan en su esencia la doble moral que muchos reconocemos en otros pero no en nosotros mismos.
¿De qué sirven las normas sociales y el andamiaje institucional si prevalece la búsqueda o intención de violentar todo aquello que, en teoría, está pensado o diseñado para garantizar nuestro bienestar?
El ContrActivismo descubre las entrañas de las lógicas colectivas, éstas que se oponen a lo colectivo y que validan todas las razones por las que no estamos dispuestos a colaborar, a pesar de “lo bien que podrían funcionar las instituciones”, pensando que, de respetar nuestras propias reglas, la desigualdad, la injusticia y la inseguridad, entre otras problemáticas sociales, dejarían de existir porque, en principio, no tendrían que suceder.
Bajo esta lógica, lo más sensato es plantear las reglas no escritas a partir de lo escrito. Por esta razón es que se reinterpreta la constitución y algunas de las principales leyes que le dan sentido, más que orden, a la sociedad mexicana.
De cuando el cinismo dejó de ser tabú y la corrupción e impunidad abandonaron la clandestinidad.
La constitución política Mexicana según el ContrActivismo
Reconocemos a la Constitución como la norma fundamental establecida para formalizar cómo se rige jurídicamente el país, marca los límites de las normas sociales, descritos en nuestros derechos y obligaciones ciudadanas. La Constitución Política Mexicana visibiliza las relaciones entre los poderes de la federación(poder legislativo, ejecutivo y judicial); los tres niveles de gobierno (federal, estatal y municipal), y los ciudadanos. Establece las bases del gobierno y de la organización de las instituciones en donde el poder se aprovecha. Establece también, a pesar de la sociedad mexicana, los derechos y los deberes del pueblo, según los intereses de los tomadores de decisiones, que pocas veces velan por la integridad física y moral de los mexicanos.
Se trata de la versión que hace alusión a la realidad jurídica mexicana, y no a la versión reconocida como la primera constitución de la historia que incluyó una gran cantidad de derechos sociales.
La Constitución Mexicana según el ContrActivismo muestra los abusos del poder contra el ciudadano, las desigualdades, la impunidad, la corrupción y las injusticias. La realidad del cinismo mexicano.